Las
TIC son consideradas como una ventaja para las empresas ya que generan
beneficios mejorando la productividad y mano de obra entre otros, además de la optimizan en el servicio al cliente. Por todo
esto las TIC influyen positiva mente en el valor de las relaciones de la empresa comercial con sus proveedores y clientes.
Los
fenómenos de innovación tecnológica han desencadenado la transformación en las
economías y en la sociedad de los países que las han adoptado. En los
últimos años se han duplicado los estudios de las TIC donde se considera que
están destinadas a la transmisión de información por medios electrónicos de
datos, sonido, voz e imagen.
Las
TIC fueron creadas para ganar beneficios como ahorro de tiempo, ahorro de
gastos de personal, fiabilidad, exactitud, reducción de errores, mejora en
inventarios y productividad, entonces qué sentido tiene invertir en una
herramienta que no va a facilitar estos procesos y que no está enfocado a la
satisfacción y necesidades de los clientes. No hay diferencias significativas
entre los diferentes sectores en cuanto a la opinión de la clientela en el
desarrollo de las TIC, sin embargo hay unos sectores más desarrollados en la
incorporación de estas herramientas como lo es el comercio minorista de
electrónica y electrodomésticos. Esto nos demuestra que cuanto mayor es la la
inversión en tecnología por parte del minorista y cuanto más novedosas sean las
aplicaciones de las TIC, mayor es la satisfacción del cliente con esta
tecnología y mayor su necesidad de interinar con las mismas.
La competitividad que no es más que la
capacidad que tiene una empresa de ampliar su cuota de mercado, ha sido
modificada por las cambiantes fuentes de eficiencia y estructura de los
mercados. Por estos continuos cambios las empresas tratan de mantenerse
competitivas con la innovación, en especial de carácter digital y la presencia
de activos o capital intangible.